Tras el sillón

He hecho algo un poco malo y mamá no me ha visto pero si se entera me va a caer una buena. Aunque claro, el pesado de Fernando estaba también ahí y si se chiva seguro que mamá le cree a él porque dice que tiene cara de ángel y la tía Nina dice que parece que no ha roto un plato en su vida, sea lo que sea eso. Aunque claro, a ellas nunca se acerca por detrás para pellizcarlas en el brazo, cogiendo toda la piel y retorciendo para que duela. Papá sí que le vio un día y le dijo que si lo volvía a hacer le castigaría sin futbol y ya no me lo hace más, aunque a veces me tira de las trenzas y yo le pego un tirón de orejas y corro con papá que me coge en brazos y me salva. Papá es bueno, pero si se enterara seguro que se pone triste. Él no grita pero pone la cara como así, baja las cejas y los labios se ponen rectos y agacha la cabeza y me dan ganas de llorar porque no quiere hacerme cosquillas. Si la tía Nina y mamá se enteran me gritarían y me darían un azote y por eso tengo que salir corriendo por si Fer se chiva porque es malo y quiere que me castiguen. Espera, oigo que viene alguien. Igual la abuela ya ha llegado y me da una galleta. Voy a ir a ver.